Dinámicas Culturales en la Comuna 7, proyecto beneficiario a la Convocatoria de Fomento y Estímulos para el Arte y la Cultura del programa de Desarrollo Local y Presupuesto Participativo de la Secretaría de Cultura Ciudadana 2022
De la serie - Hábitat Cultural de la Comuna 7
Charlas, tertulias, audiciones comentadas, conciertos, trueques musicales son algunos de los eventos que se realizan en el Centro de Documentación Musical El Jordán.
Esta vieja casona cuyo uso se ha ido adaptando al devenir de los tiempos, hoy alberga colecciones de libros, discos compactos, vinilos, revistas, etc., que dan cuenta de la historia musical de la ciudad.
Atrás quedaron esos años oscuros en los que la casa se caía a pedazos y fue saqueada a causa del abandono al que fue sometida tras su cierre en 2007. La movilización ciudadana en aras de no permitir que El Jordán se viniera abajo, despertó el interés de la Administración Municipal, que finalmente compró el predio y en 2015 inició el proceso de restauración a cargo de la Fundación Ferrocarril de Antioquia. Dos años después y con una inversión aproximada de 2 mil 500 millones de pesos, el Centro de Documentación Musical El Jordán abrió sus puertas al público para darle una nueva vida al lugar.
Aunque en sus inicios, en 1891, era un sitio de recreo en el que las familias adineradas de la ciudad podían disfrutar de las piscinas naturales que tenía la casa y tomarse algo, El Jordán se fue adaptando a diferentes usos acordes con las transformaciones de la ciudad. Poco a poco se convirtió en un sitio importante debido a su ubicación estratégica sobre la ruta de quienes venían del occidente antioqueño hacia Medellín, una parada obligada donde se podía descansar un rato y tomarse algo antes de volver al camino.
En los años 20 comienza una profunda relación con la música que le dio sus días de gloria, primero para escuchar, luego con el auge de la industria musical se convierte en uno de los bailaderos más importantes de la ciudad. Más adelante sería sitio de encuentro de intelectuales y universitarios.
“Después de esa época empezó un lento declive porque competía con muchos otros espacios de la ciudad que también ponían música vieja y en los que se podía bailar”, manifiesta Santiago Arango, gestor coordinador del Centro de Documentación Musical El Jordán. Añade que “en 1981 se celebran 100 de El Jordán, ya no era lugar de antes, era una casa muy tradicional pero no con el impacto que tuvo años atrás porque en ese momento esta ya era otra ciudad”.
Con la violencia generada en la ciudad en la década de los 90, se agravó la situación de este espacio que finalmente fue cerrado en el año 2007, pues ya era muy difícil mantenerlo a flote: en ese entonces era un lugar para tomar cerveza y jugar billar, recuerda Arango.
Un nuevo comienzo
Como Centro de Documentación Musical adscrito al Sistema de Bibliotecas Públicas de Medellín, El Jordán ha tenido un resurgir que no solo lo ha revitalizado, sino que también le ha dado el empuje para ser un referente en la ciudad.
Al ser una unidad de información especializada se orienta a construir y preservar la memoria musical de Medellín, por lo que además de realizar investigaciones sobre el tema, cuenta con una colección de libros sobre diferentes géneros musicales, así como discos compactos, vinilos, revistas, que hacen parte de la historia de la música de la ciudad.
Una oferta permanente y un fuerte trabajo de comunicaciones para dar a conocer sus servicios, le han permitido posicionarse muy bien al cabo de estos años. Según Santiago Arango “el gusto de las personas por venir ha sido muy positivo, siempre tenemos actividades, siempre tenemos visitas, siempre tenemos gente que quiere estar aquí, ofrecer una actividad y creo que eso es muy importante para El Jordán como un lugar público, porque las personas son las que les dan sentido a los espacios”.
Y es que aquí los visitantes pueden realizar diferentes actividades relacionadas o no con la música. Desde estudiantes que vienen a hacer sus tareas hasta personas que trabajan de manera remota y sienten en este espacio la tranquilidad necesaria para hacerlo, los visitantes de El Jordán han hecho de este lugar un sitio de encuentro en el que pueden jugar una partida de ajedrez o tomarse un tinto con los amigos o disfrutar de la variada oferta cultural.
Programas
- Exposiciones dedicadas a la música
- Club de la música
- Programación cultural como conciertos, audiciones comentadas, charlas y tertulias sobre diferentes géneros musicales.
- Trueque musical: espacio para intercambiar música, discos compactos, vinilos, instrumentos. Se realiza tres veces al año.